La energía solar ha pasado de ser una opción reservada para los más concienciados con el medio ambiente o aquellos que buscan reducir su factura de luz, a convertirse en una alternativa accesible para un público mucho más amplio.
Democratización de la energía solar
Esta accesibilidad se debe a la “democratización” de la energía solar, un proceso que permite que más personas se beneficien de esta tecnología, incluso si no disponen de un tejado donde instalar paneles solares o del capital necesario para realizar dicha inversión. Aquí es donde entran en juego las Comunidades Solares, una solución innovadora para empresas.
Para quienes aún no estén familiarizados con el concepto, una Comunidad Solar permite a los usuarios recibir energía directamente del sol sin necesidad de tener su propia instalación fotovoltaica. Esto significa que no es necesario instalar paneles en nuestro tejado, ni gestionar permisos, para aprovechar la energía solar.
Beneficios de unirte a una Comunidad Solar de Soldelia
En concreto, las comunidades solares de Soldelia utilizan grandes superficies de cubiertas de naves para instalar paneles solares. La energía producida se distribuye entre las empresas ubicados dentro de un radio de dos kilómetros de la instalación.
Las empresas pueden unirse a las comunidades solares de Soldelia y recibir una porción de la energía producida, según la cantidad de potencia que contraten. Esto les permite acceder a energía solar sin ninguna inversión inicial, sin la necesidad de poseer un tejado propio ni cambiar de comercializadora. La energía suministrada por la Comunidad Solar suele ser, en promedio, un 50% más barata que la energía convencional de la red, lo que puede traducirse en un ahorro de hasta un 40% en la factura mensual.